Jugar con Slime se ha convertido en el nuevo furor de los niños; la popularidad de este particular juguete ha hecho que muchos pequeños se diviertan mientras también aprenden. El slime se ha viralizado sobre todo en redes sociales, en las que incluso, se encuentran cientos de tutoriales para aprender diversas formas de juego y nunca aburrirse.
¿Qué es el slime?
El slime, también conocido como “moco de gorila” o “moco de unicornio” es una especie de masa moldeable con los colores del arcoíris y algo de purpurina. Se trata de una masa viscosa, que se puede estirar y moldear en cualquier figura que desee, con ingredientes como colorante, detergente, almidón de maíz, pegamento y bicarbonato. Fue lanzado oficialmente como un juguete en 1976 por la empresa Mattel.
La empresa ha mencionado en varias ocasiones que jugar con smile no representa ningún peligro para los niños, puesto que sus componentes no son tóxicos y puede ser usado por niños de cualquier edad. Aunque en el mercado existen diferentes versiones de slime y en diversas formas, también es vendido para poder moldearlo e incluso, gracias a su popularidad, se han viralizado tutoriales de cómo hacer el slime en casa.
Para muchos padres, la idea de que sus niños puedan jugar con slime puede implicar algo de desorden y quieran evitar este juguete por esta razón, sin embargo, se ha comprobado que el slime estimula a los niños a través del juego al usar sus manos para crear, por lo que genera varios beneficios que describimos a continuación.
Beneficios de jugar con slime para los niños
Estimula la creatividad
Sin duda jugar con slime, permite que los niños pongan a trabajar su creatividad e imaginación. Esto resulta una gran ventaja para que los niños puedan tomar sus propias decisiones basándose en la fantasía y obtener la satisfacción de haber creado algo por sí mismos.
Estimula los sentidos
El slime es una gran opción para estimular los sentidos, ya que moldear el slime y formar diferentes figuras, implica el tacto, el olfato, la vista e incluso el oído en los niños. Puede resultar beneficioso para que los pequeños entiendan cómo usar y para qué sirve cada uno de ellos.
Estimula la motricidad fina
Jugar con slime implica usar las manos y hacer ciertas tareas como moldear, cortar, estirar, apretar, entre otras, las cuales ayudan a desarrollar habilidades manuales que son muy importantes estimular en los niños mientras están creciendo.
Estimula la concentración
Los niños cuando son muy pequeños, están descubriendo cómo controlar sus emociones, por lo que jugar con slime, es un gran ejercicio de concentración, a través del cual puede canalizar su energía e incluso aliviar su estrés. Los juguetes tecnológicos suelen generar problemas de concentración y enfoque, por lo que jugar con slime, es una manera de que los niños puedan canalizar su energía y concentración en una actividad motora.
Hoy es posible encontrar en el mercado diferentes tipos de slime y elegir según el color, la presentación, figuras, entre muchas opciones para que la diversión no pare y los niños encuentren en este juguete, una manera sana de entretenerse, aprender y estimular sus sentidos.